...cada semilla aguardo paciente entre el
adobe, aquí están una vez mas, y así cada otoño convertidas en flores reavivan
los muros del tiempo. Y en este sitio al unisono del viento frío el quebranto
de las hojas se pueden sentir. Altas las hierbas con su grata visita de flores
se van sutilmente tiñendo como notas en pentagramas, como agua de río sobre los
cerros...
Encantador festejo a la vida, a la
memoria selecta de este todo, y ahí en cada centímetro de los paisajes con sus
perfumes de tejocote se refleja un eterno collage de virtudes, un eterno ramo
de nobleza, un eterno mural de mil sentires, un eterno azul, una eterna
obsidiana...
*Eres tu mi otoño, manifestación consciente
del poder de la vida de años y años de evolución.*
... en las bardas te encuentras hoy. siempre.
El otoño
Ya el sol, Platero, empieza a sentir
pereza de salir de sus sábanas, y los labradores madrugan más que él. Es verdad que está desnudo y
que hace fresco.
¡Cómo sopla el norte! Mira, por el suelo,
las ramitas caídas; es el viento tan agudo, tan derecho, que están todas
paralelas, apuntadas al sur.
El arado va, como una tosca arma de
guerra, a la labor alegre de la paz, Platero; y en la ancha senda húmeda, los
árboles amarillos, seguros de verdecer, alumbran, a un lado y otro, vivamente,
como suaves hogueras de oro claro, nuestro rápido caminar...
Juan Ramón Jiménez
Pedro Aznar/si no oigo mi corazón
Gustavo Cerati/Llegaste