Jiutepec Morelos. 2011. Árbol.
Se permite ser árbol cada una de sus
noches,
para que sus hojas acariciadas por el
aire vuelen alto,
vuelen sin freno alguno.
Se siente en cada extremidad el paso del
clima implacable,
de los siglos sin tregua en cada linea de
sus ramas,
de esos brazos múltiples, fraternales.
Todo inicio en algún instante de gran
fortuna,
un segundo plagado de vida uniéndose con
la tierra,
llevando consigo raíces, trazando su
historia.
Compañero verde, de savia noble,
de tonos claroscuros que se plasman en su
tenue andar.
Árbol de esta vida, tan fuerte como los
tuyos,
tan grato en esta breve historia en cada
humano,
un hermano para los que saben observarte
hoy siempre serás.
travis/follow the light